Un investigador de Morgan Stanley, tras reunirse con el CFO de Apple Peter Oppenheimer, se suma a la corriente general de los analistas que dan por segura la llegada de un iPhone de bajo tamaño y coste para competir con los smartphones Android que dominan el mercado de la telefonía móvil y en especial contra su mayor competidor Samsung.
Vuelven las especulaciones sobre los nuevos smartphones que prepara Apple y entre ellos, un iPhone mini. Terminal más pequeño y barato que los actuales y del que se rumoreaba incluso antes del lanzamiento del iPhone original en 2007.
Este ‘low cost’ estaría enfocado a su venta en mercados emergentes (aunque se vendería en todas las regiones) especialmente en China, prioridad absoluta para Apple ya que generó 5.700 millones de dólares en el último trimestre y del que vendió más de dos millones de unidades del iPhone 5 en el primer fin de semana de lanzamiento.
Según el analista de Morgan Stanley un modelo como este «tiene sentido» tras el éxito del iPad mini en países emergentes como China o Brasil donde el 50 por ciento de las ventas fueron de nuevos clientes.
Incluso con un tercio de grado de canibalización hacia los iPhones estándar y un mínimo del 40 por ciento de margen bruto, el iPhone Mini sería un éxito económico.
China es ya el segundo mercado para Apple y el potencial de 1.300 millones de seres es una tentación para un director financiero como Peter Oppenheimer. Apple no lo ha confirmado pero todos los indicios apuntan a lanzamiento de un iPad mini.
