La movilidad ha irrumpido en el mundo del retail. De hecho, lo que hasta hace poco era un futuro, es un presente que ha evolucionado hasta el showrooming. Este término anglosajón define el hecho de visitar tiendas físicas para probar productos que después se compararán y comprarán a través de dispositivos móviles en otros lugares. Una oportunidad para los consumidores y un lastre para los vendedores.
Algunos estudios ya apuntan que el showrooming es una ruina para el retail. Los usuarios aprovechan las exposiciones de los grandes distribuidores para saber cómo serán los productos que luego comprarán en otras tiendas más económicas ya sea por Internet o presenciales. Sin embargo, ¿Cómo darle la vuelta a la situación?
Grandes retailers como Best Buy comienzan a poner en marcha técnicas contra el showrooming. Concretamente, la cadena muestra una comparación de precios en las exposiciones de sus tiendas. Los consumidores pueden saber cuánto valdrá determinado producto en 19 empresas competidoras y evitar así la fuga de clientes a otros puntos de venta.
Más allá de este ejemplo, pocos pasos se están dando para evitar la caída de clientes debido al showrooming. Aplicaciones comparativas, geolocalización para mostrar las mejores ofertas o promociones puntuales para animar el comercio pueden ayudar a aplacar esta tendencia que con los dispositivos móviles cobra más fuerza.
Una realidad presente
Pero ¿Hasta dónde llega el showrooming? Desde TNS nos llega una infografía que nos muestra la fuerza de esta costumbre entre los consumidores. España es uno de los países que lidera la transformación de hábitos de consumo y ya el 63% de los usuarios con móvil declara haber ido a una tienda a probar un producto para comprar en otro lugar.
Entre los usuarios de 16 a 30 años es donde más fuerza cobra el showrooming. Este público, considerado como los primeros en adaptarse a las nuevas tecnologías, son los potenciales consumidores del hoy y mucho más, del mañana.
No obstante, más allá del móvil, todavía tiene mucha relevancia el papel del dependiente. En Europa el 51% de los consumidores prefiere preguntar al profesional mientras que en España el porcentaje baja al 40%. En nuestro país, el 28% utiliza el móvil en el comercio para comparar precios, pedir consejo a amigos o familiares o tomar fotos del producto.
Os dejamos con la infografía de TNS que ofrece mucha más información sobre el tema:
