Pese a ser buenos tiempos para el comercio electrónico, no todas las tiendas triunfan por igual. Amazon ha hecho mucho daño a tienda on-line como Pixmania que lleva más de 14 años vendiendo por Internet. La empresa de los hermanos Rosenblum, perteneciente al grupo Dixons Retail, ve caer y caer su negocio.
Pixmania cerró 2013 con una facturación de 300 millones de euros ganados entre los 14 países europeos en los que opera. Francia y República Checa son sus principales motores del negocio. Sin embargo, España no ha dejado de darle malas noticias.
A principios de 2013, Pixmania anunciaba que cerraba todas las tiendas físicas en el mercado español y portugués. Una decisión que se tomaba debido a las pérdidas de 25 millones de euros que se habían dado en el año 2012. El cierre también se fue dando progresivamente en otros países, e incluso, la marca desapareció en algunos países europeos.
El reto con estas acciones era redifinir su estrategia y levantar el negocio por la vía on-line ahorrando los costes de los comercios físicos. Pero no todo ha ido como se esperaba.
Sangría de clientes
Si en 2011 Pixmania contaba con 10 millones de clientes activos, durante el año pasado la cifra cayó hasta los 2,4 millones. Una cifra que no habla bien de su negocio teniendo en cuenta que cada día crecen los usuarios que compran por Internet o que se adentran en el mundo on-line.
No obstante, Pixmania no quiere tirar la toalla. El anuncio de Luis Krug, ex de Redcoon u Oooferton, como CEO de Pixmania España quiere ser el inicio de una nueva era. El responsable intentará liderar la nueva reestructuración de la empresa y elevar el negocio de nuevo. ¿Lo conseguirá?.
