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Dos de cada diez españoles roban en el comercio

mangan en el comercio

El 23 por ciento de los españoles reconoce haberse llevado algún artículo de un comercio sin pagar y hasta el 44 por ciento lo haría si tuviera la seguridad de que no lo iban a pillar, según concluye el “Estudio de Seguridad Ciudadana 2014” de la empresa de seguridad Tyco Integrated Fire & Security, que también ofrece consejos para ayudar a los comerciantes a limitar hurtos reforzando las medidas de seguridad.

Aunque el robo organizado por profesionales tiene un impacto económico mucho mayor que el hurto en comercios los resultados de Tyco son inquietantes en plena campaña navideña ya que aumentan en un 40 por ciento coincidiendo con los momentos de mayor afluencia de público en las tiendas, fines de semana y en los momentos de apertura o cierre.

Tyco explica que, este tipo de hurtos perpetrados por “crimen no organizado” es decir por clientes o incluso empleados de las propias tiendas, pueden llegar a suponer perdidas al comercio minorista de 500 millones de euros. Según los datos, la pérdida desconocida cuesta a los comercios una media del 0,8% de su facturación. El hurto de clientes y grupos organizados representa en torno a un 62%, mientras que el hurto interno por parte de los propios empleados representa hasta el 22% de las pérdidas del comercio.

Por productos, la tecnología está a la cabeza de los hurtos ya que smartphones y tablets son junto a las botellas de alcohol y los perfumes el principal objetivo de los ladrones. Tyco Integrated Fire & Security propone algunas medidas para reforzar la seguridad en el comercio minorista:

  • Los sistemas de seguridad deben estar  visibles. Los sistemas antihurto y cámaras de seguridad no solo protegen los artículos, también tienen un efecto disuasorio. Colóquelos de forma que estén claramente visibles. Especialmente en los puntos más vulnerables, como la entrada a los probadores o las salidas de emergencia.
  • Poner especial atención a los puntos más vulnerables de la tienda, como pueden ser los probadores o las salidas de emergencia.
  • Que las medidas de seguridad se tengan en cuenta desde el diseño inicial del comercio. Lo ideal es planificar la tienda de forma que los clientes deban pasar por delante de la caja antes de salir. Mantener el espacio siempre limpio y ordenado es conveniente, y no exponer productos junto a la puerta. Estas pequeñas pautas, no sólo dan mejor impresión a los clientes, también ayudan a los empleados a controlar que no falte ningún producto.
  • Que cumplan su misión sin interferir la experiencia de compra. Las medidas antihurto no deben interferir en la experiencia de compra de los clientes: es importante que puedan ver correctamente todos los productos, y en la medida de lo posible, tocarlos y probarlos. Hoy en día existen sistemas de protección efectivos que permiten hacerlo.
  • Formar a los empleados para evitar el hurto. El número de dependientes tiene que ser suficiente y deberían estar formados en técnicas de vigilancia, para identificar y evitar los comportamientos habituales de los ladrones para identificar los comportamientos habituales de los hurtadores ocasionales y evitarlos.
  • Establecer medidas para controlar también el hurto interno. Una de las causas principales de pérdidas en el comercio es el hurto interno. Es posible evitarlo con sistemas y medidas operativas y de gestión que permitan realizar un seguimiento efectivo del inventario, de las operaciones en caja y del almacén.
  • Al mismo tiempo, las herramientas tecnológicas de protección actuales permiten además gestionar de forma más eficiente la tienda, al ofrecer al comercio información relevante sobre sus clientes.
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