Aunque muchos de los pinitos comerciales de Facebook no han sido exitosos, la red social de Mark Zuckerberg sigue intentándolo. El último avance para conseguir que los vendedores utilicen su plataforma viene de la mano de varias iniciativas entorno al comercio móvil.
La comunidad on-line es consciente de que es una gran influencia para los consumidores y quiere aprovecharlo. Según sus datos, la mitad de sus usuarios se conecta para ver productos y encontrar nuevas marcas o artículos. Unos internautas que cada vez utilizan más el móvil para acceder a aplicaciones, comprar y entrar en Facebook.
La mitad de los usuarios se conecta a Facebook a ver productos
Con este panorama alentador, Facebook anunciaba ayer mismo mejoras para vender más. Varias propuestas, algunas ya implantadas desde hace tiempo, para acercar las marcas a los consumidores de una forma más accesible, diferente y convertible en venta.
Canvas: todo listo para comprar
Entre los anuncios, el más interesante es Canvas. Este sistema, todavía en fase de experimentación, permite acoplar una tienda on-line adaptada a dispositivos móviles. Este servicio simplifica al máximo la interfaz comercial para centrarse en parámetros clave que incremente la conversión.
Con ella, los compradores podrán directamente elegir y comprar el portátil, zapatos o bolso que quieren de una forma amigable sin salir de Facebook. Un círculo perfecto para la corporación de Zuckerberg.
A esta tecnología se le acoplan otras como la remodelación de las tiendas on-line dentro de páginas de empresa o la opción de desplegar un catálogo de productos accesible desde smartphones o tablets.
Además, Facebook ha incorporado el botón de Compras en los favoritos de los perfiles de los usuarios. Una forma más de ayudarles a tener todo muy a mano para cerrar el círculo comercial.
La compra social
El marketing social todavía es un reto tanto para vendedores como para las propias comunidades on-line. Todas las grandes como Twitter, Facebook, Instagram o Pinterest están en la misma batalla con propuestas que cada vez suenan mejor o, al menos, más adaptadas.
Sin embargo, todavía ninguna ha encontrado la solución definitiva para enganchar al cliente. Un consumidor cada vez más involucrado en las redes sociales pero a la vez más escurridizo y menos impresionable.
