No en vano es un sector que incrementa negocio día a día en este y otros campos. Concretamente, los ingresos generados por proteger el mundo interconectado alcanzarán los 309 millones de euros (348 millones de dólares) en 2016, según previsiones de Gartner.
El negocio de la seguridad alrededor del IoT crecerá a un ritmo del 23,7% desde los 249 millones de euros (281 millones de euros). Un ratio que no solo crecerá para este año sino que continuará añadiendo facturación gracias a la evolución de productos y servicios entorno a esta tendencia.
Respecto a este incremento del sector, Ruggero Contu, director de investigación en la firma analista comenta:
«El mercado de seguridad IoT todavía es pequeño pero está creciendo a medida que consumidores y empresas empiezan a usar más que nunca dispositivos conectados».
De hecho, el empuje de la seguridad es más que lógico. En 2016 se esperan 6.400 millones de dispositivos conectados que para 2018 serán 11.400 millones. Una ingente cantidad de hardware sobre el que correrá software y servicios que proteger.
Pese a que el presupuesto de las organizaciones para este área será menos del 10%, la firma espera que en 2020 el 25% de los ataques vayan dirigidos a las empresas. Un desafío no solo de protección sino también de concienciación donde los partners tienen mucho que decir.
