BMW, Intel y Movileye han anunciado un acuerdo estratégico para crear coches autónomos. El acuerdo se concretará en 2021 cuando se comercialice el modelo iNext de la firma alemana.
La industria del automóvil transcurre por un gran proceso de inmersión tecnológico en el que trabajan los grandes fabricantes de coches y también las tecnológicas. Coches autónomos, inteligentes, conectados y ecológicos son la referencia donde se dirige el sector.
Algunas grandes de la industria automotriz observan con cautela la entrada de los chicos de Silicon Valley en su sector. Otros creen que la unión de fuerzas parece imprescindible y hacia ello apunta este acuerdo donde Intel pondrá la tecnología y máquina de aprendizaje junto a Movileye que proporcionará las cámaras y los sensores. BMW hará el resto para tener el iNext en el mercado en cinco años.
El acuerdo también implica la creación de una «plataforma abierta» para que terceros puedan crear coches autónomos. La plataforma contempla varios niveles de autoconducción, primero «sin los ojos», después «sin la mente» y en la etapa final «sin un conductor humano» en el interior del vehículo.
El anuncio del acuerdo coincide con el primer accidente mortal registrado en un Tesla Model S con el piloto autónomo conectado. El accidente fue provocado por un camión de gran tonelaje pero la maniobra no fue detectada por los sensores del Tesla.
Desde el fabricante se ha recordado que no es un dispositivo perfecto que obliga a que el conductor se mantenga alerta y tome el control ante un imprevisto. Todavía queda tiempo y desarrollo para mejorar aspectos de los coches autónomos y la seguridad es un punto destacado, pero no cabe duda que el coche inteligente se hará un hueco en la industria del automóvil con la participación de las grandes tecnológicas.
