La primera mitad del año ha dejado buenos resultados para uno de los buques insignia de Samsung. Su Galaxy S7 Edge se ha establecido como el terminal Android mejor vendido con alrededor de unas 13,3 millones de unidades, según las estimaciones de Strategy Analytics.
El Samsung Galaxy S7 Edge supone el 2,3% de las ventas totales en el primer semestre: 539 millones de smartphones de los cuales solo el iPhone ha conseguido superar en número de ventas al modelo de Samsung. Por detrás, el Galaxy J2 y Galaxy S7 tuvieron una demanda de 13 y 11,8 millones, respectivamente.
Samsung presentó durante el Mobile World Congress de 2016 este nuevo terminal junto a su hermano de pantalla ligeramente más pequeño. Desde el primer momento la acogida fue buena llegando a vender 9 millones de terminales en el primer mes de venta. A partir de ahí, Samsung ha conseguido reavivar sus datos.
Los datos corroboran que los modelos de gama alta todavía son referencias con tirón exclusivo. Pese a que el mercado de gama media-baja se ha cubierto de cientos de propuestas de bajo coste, todavía hay muchos consumidores dispuestos a gastar más de 700 euros en un smartphone. Es cierto que solo son un porcentaje pequeño, pero vital para los fabricantes. Gracias a eso, Samsung y Apple siguen siendo líderes.
El éxito del Samsung Galaxy S7 Edege también es un triunfo más de Android. El sistema operativo móvil más utilizado continúa con cuota cercanas al monopolio sin que iOS y, mucho menos, Windows Phone hayan conseguido desbancarle. Una perfecta noticia para Google también.
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