La Fundación Raspberry Pi, organización británica sin ánimo de lucro responsable de los mini-PC de placa única que domina las ventas del segmento, ha anunciado la ampliación de sus distribuidores mientras sigue batiendo récords de venta.
La medida llega tras el anuncio de los 250.000 unidades vendidas del último modelo Raspberry Pi Zero W en apenas cuatro semanas, una versión actualizada de la Raspberry Pi Zero, con procesador potenciado y el añadido de un chip inalámbrico de Broadcom con Wi-Fi n y Bluetooth 4.0, el mismo que está presente en la versión estándar, Raspberry Pi 3.
El modelo cuesta solo 10 dólares y como era esperable ha sido objeto de deseo en los dos meses que lleva en el mercado. Un tema común en los foros Raspberry Pi ha sido la dificultad de adquirirlo y la necesidad de apoyarse en el canal. Así, Raspberry Pi ha añadido trece minoristas en países como Australia y Nueva Zelanda, Alemania, Dinamarca, Suiza o Japón.
No hay datos globales de venta en 2017 de estos desarrollos, pero el pasado septiembre llevaba vendido más de 10 millones de unidades. Todo un éxito de ventas este mini-ordenador de placa única con base ARM y Linux, que puede ampliarse gracias al soporte a Windows 10 que anunció Microsoft como parte del programa Windows Developer Program for IoT.
Raspberry Pi se puede utilizar para un montón de proyectos, para programación, como centro multimedia, como base para crear PCs básicos, para máquinas de juego y un larguísimo etc, en la que trabajan una multitud de apasionados de este desarrollo que ahora contarán con nuevos minoristas para adquirirla.
