Sabemos que las ventas de coches eléctricos en Estados Unidos y Europa hace tiempo que dejaron de ser algo anecdótico, gracias a la apuesta que tanto Tesla como otros fabricantes con más «solera» han ido haciendo por este tipo de vehículos.
Una mayor variedad de coches eléctricos supone un mayor atractivo para el consumidor, que tiene más donde elegir y que por tanto puede encontrar algo que se ajuste totalmente a sus gustos, a sus necesidades y también a su presupuesto.
Según los datos que ha compartido Bloomberg las ventas de coches eléctricos crecieron durante el pasado trimestre en un 38% en Europa, una cifra que refleja una apuesta clara por parte de los consumidores hacia este tipo de vehículos.
Decimos esto porque los datos de crecimiento que se registraron durante todo 2016 apenas fueron de un 2,9%. La diferencia es grande, y pone de manifiesto que los coches eléctricos no son el futuro, son el presente.
En Estados Unidos se han repetido los buenos resultados. Las ventas de coches eléctricos crecieron un 49% durante el primer trimestre del año, y las expectativas para los próximos trimestres se mantienen en positivo.
A la hora de buscar un «culpable» de este crecimiento es imprescindible hablar del lanzamiento de modelos «asequibles» y versátiles, como el nuevo Renault Zoe, que ofrece una autonomía de 400 kilómetros por carga y tiene un precio de 23.600 euros.
Tampoco debemos pasar por alto los movimientos de precio que ha ido llevando a cabo Tesla, aunque creemos que el auténtico «golpe sobre la mesa» de la firma de Elon Musk se producirá con el lanzamiento del Model 3 a finales de este año.
