Automoción: muchos movimientos, una dirección

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Apple, Alphabet, Intel, Huawei, NVIDIA o Microsoft escarban cada vez más profundo en el negocio de la automoción. Un universo donde los competidores se multiplican para enganchar una porción de los 18.400 millones de dólares que se ingresarán en 2017 entorno a los coches conectados. Pero el negocio solo acaba de comenzar.

Para 2022 se espera que la mitad de los vehículos que circulen estén conectados. Una masa que necesitará mejores redes para conectarse, más sistemas de navegación y seguridad, y nuevas opciones de entretenimiento. Un amplio mundo de posibilidades que hace que prácticamente ninguna tecnológica quiera quedarse fuera de esta oportunidad. Incluso BlackBerry, que está prácticamente muerto en el apartado móvil, reclama su espacio.

El movimiento entorno a la automoción es tal que ya no hay feria o evento TI que se precie en la que no haya un coche. Un modelo, que independientemente de la casa fabricante, cuenta con fórmulas de conexión que nos anticipan un futuro donde la tecnología será más importante si cabe.

Últimos movimientos: Apple, Alphabet o NVIDIA

El más avanzado entorno a la automoción es Alphabet. Google lleva mucho tiempo probando su coche autónomo con el que quiere pasar de ser un proveedor de tecnológico a un vendedor más del sector. Para ello, su división especializada, Waymo, ha firmado un acuerdo con Avis por el cual incluirá su oferta de vehículos dentro de la flota de la compañía de alquiler.

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Bastante menos avanzada y más misterioso es el caso de Apple. Aunque oficialmente no ha dicho nada si ha confirmado lo que se sabía desde hace mucho tiempo: los de Cupertino tienen algo entre manos. De hecho, el proyecto avanza con el apoyo de Hertz que le cederá algunos vehículos para hacer pruebas de su tecnología autónoma.

Los fabricantes más clásicos del sector tampoco están quietos. Tesla, BMW, Volkswagen o Toyota llevan tiempo planificando sus posicionamiento entorno al nuevo paradigma que se está construyendo en su sector. Por su parte, la última noticia viene de la mano de Volvo que se ha unido a Autoliv para crear una joint venture, denominada Zenuity, desde la que desarrollar software para el coche autónomo. Esta plataforma contará con el soporte de NVIDIA y su Drive PX.

Mucha actividad, una dirección

Aunque cada corporación tiene su propia estrategia y aproximación al mercado de la automoción, lo cierto es que este mundo está virando hacia una misma dirección: la conducción cada vez más asistida donde la inteligencia artificial, el IoT y la seguridad cobren un protagonismo especial.

El paradigma final es el coche autónomo para el que ni las leyes, ni los precios ni los propios consumidores están del todo preparados. Tampoco lo están para los coches voladores que, pese al interés que suscitan, no parecen el medio de transporte por el que más conductores apostarían.

En este sentido, estamos lejos de que los coches autónomos sean los reyes de las carreteras -aunque en algunas ciudades se plantean que sea así– pero la idea es que cada vez estén más presentes. Un nutrido grupo para el que es necesario desplegar contenidos, conexiones y tecnologías acordes a las necesidades de cada conductor. Un mundo por descubrir donde los proveedores de servicios capaces de adaptarse tendrán mucho que contar.

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Coordinadora editorial de MuyCanal. Danzando día a día entre partners, mayoristas y fabricantes para profundizar en el canal de distribución tecnológico.