Las baterías de ion de litio están experimentando una subida de precio considerable debido al incremento de los costes de los materiales necesarios para su fabricación, y también a la mayor demanda de este componente.
Con el despegue del mercado smartphone y tablet el uso de las baterías de ion de litio ha crecido de una manera que hace unos años nos habría parecido increíble, pero debemos tener en cuenta que dicho componente también se utiliza en ordenadores portátiles e incluso en los coches eléctricos, dos mercados que también son bastante grandes y cuya importancia está fuera de toda duda.
Esta subida de precio no es la primera que experimentan las baterías de ion de litio en lo que llevamos de año, aunque según la fuente de la noticia no empezará a tener efectos reales hasta el próximo mes de septiembre.
Los principales fabricantes de ordenadores portátiles han confirmado que con la subida que se producirá en dicho mes esperan que el coste de sus baterías se eleve entre uno 10% y un 20%.
Como anticipamos hay dos factores clave para entender esta subida, una mayor demanda de baterías de ion de litio por parte del sector móvil, de los fabricantes de ordenadores portátiles y de la industria del automóvil eléctrico; pero también un incremento del coste de los materiales necesarios para fabricarlas.
En este sentido el cobalto experimentó una subida importante en febrero de 2017 debido al endurecimiento de la normativa dedicada a minería de dicho material en China, mientras que el litio se ha encarecido en un 60% desde 2016.
Con el auge de los coches eléctricos se mantendrá un incremento gradual en la demanda de baterías de ion de litio, así que no se espera que se produzca ninguna bajada en los precios al menos durante los próximos tres años, de hecho lo más probable es que sigan creciendo gradualmente.
