Cada día es más importante Facebook o Twitter en la vida de usuarios, clientes y empresas. Las redes sociales han calado muy hondo. Hasta tal punto que ya muchos no son nadie si no twittean sus impresiones o explican qué hacen. Pero ¿podemos trasladar todo esta vorágine social a nuestros eventos? La respuesta es afirmativa, ahora solo tenemos que saber cómo.
Integrar los medios sociales dentro de un evento tiene que ser una tarea planificada. No podemos decir 5 minutos antes del acto que queremos hacer un seguimiento. Si lo hacemos, seguramente la propuesta no llegue a buen puerto y nos haga quedar peor que sin el componente social media.
Así, gracias a la ayuda de Social Media Today vamos a resumir los puntos más destacados para conseguir que nuestra cita sea un éxito social. Además, podremos involucrar mucho más a nuestra audiencia, motivarles a compartir contenido con más público, construir una comunidad y, en definitiva, vender mucho más.
Tener un plan
Es esencial planificar nuestra estrategia social. Si sabemos que el día 25 de octubre vamos a realizar un acto con clientes, seguramente empecemos a buscar un lugar, unos meses antes. Entonces ¿por qué no pensar en los medios sociales en esa fecha? Quizás no sea necesario comenzar a actuar en esa fecha pero si saber qué cobertura daremos, qué medios necesitamos…
Para tener todo preparado y no morir en el intento de llegar a todo, tenemos que ser conscientes de nuestra limitaciones como empresa. No podemos atender a 10 redes sociales distintas si solo somos 2 personas y tenemos que estar a todos los detalles del evento. Conocer nuestra limitaciones y actuar en consecuencia, nos ayudará.
Pre y post evento
Los medios sociales no solo se utilizan en pleno evento. Aunque su momento álgido en cuando la cita se está desarrollando, muchos usuarios se enteran por este medio sobre la existencia de determinadas conferencias a través de ellas. De ahí, la importancia de ir «calentando motores» unos días antes, además de ofrece una crónica posterior con todos los detalles.
Información
Los usuarios deben saber que estamos actuando en Facebook, Twitter o cualquier otra red social. De poco sirve crear un hashtag, tener todo preparado para un cobertura en directo, si no somos capaces de explicar a los clientes que estaremos en esos espacios.
Por ello, además de seguir la pauta del punto anterior, podremos ir haciendo referencia a las redes sociales durante el evento o incluso poner pantalla que demuestren que se hablando fuera de los límites físicos.
Dinamización
Las redes sociales solas no son más que una plataforma de comunicación. Es necesaria la actividad humana para que estas tengan sentido. Sin embargo, dependiendo del tamaño y/o éxito de nuestro evento, puede que el movimiento social no sea demasiado elevado. Por ello, es una buena idea contar con un community manager que dinamice la acción en las redes sociales.
Dar valor
Si los usuarios apuestan por seguir un evento en redes sociales es porque quieren conocer lo que ocurre en el mismo. Para ello tenemos ofrecer contenido. No vale con hacer tweets generales sin explicar demasiado; debemos aportar fotografías e incluso vídeos que demuestren qué está pasando, qué se está diciendo… Estos serán argumentos por los que los usuarios nos seguirán.
Contenido ameno
Los contenidos no solo tienen que dar un valor sino también aportar un extra de diversión. La audiencia utiliza las redes sociales no solo con un enfoque profesional sino también lúdico por lo que enfocar los contenidos hacia el entretenimiento, es una idea más que recomendable.
Así, debemos huir de largas informaciones o recursos aburridos y escoger los más atractivas, visuales y dinámicos. Esto no quiere decir que no demos datos corporativos sino que optemos por los menos arduos. 
Experiencia social
Relacionado con el punto de la información, debemos hacer que los asistentes se involucren en nuestra actividad social. Lejos de poner una pistola a nadie para que escriba tweets o comente en Facebook, podemos poner pantallas donde recreemos la conversación, incluir las páginas sociales en la información del evento o animar a que cuenten sus experiencias o impresiones a través de las redes sociales.
Viralidad
Las redes sociales consiguen un efecto viralizador muy potente si conseguimos enganchar al público. De ahí que transmitir lo que realmente interesa, captar la atención de la audiencia y hacer que comparta eso con sus contactos, nos ayudará a llegar el evento o incluso la marca corporativo, mucho más lejos.
Para ello, podemos utilizar encuestas, recursos humorísticos o incluso datos inéditos sobre el tema que tratamos. En definitiva, debemos captar al público con algo nuevo que les ayude a difundirlo entre sus círculos sociales.
