De hecho, estos pequeños portátiles de reducido coste -y prestaciones- fueron todo un éxito, en parte seguramente gracias a la crisis económica que hizo a los usuarios buscar soluciones que simplemente cumplían y que permitían ahorrar bastante frente a los portátiles tradicionales.
Tres años después los netbooks están de capa caída, pero los Atom siguen en desarrollo, con el objetivo de conquistar terrenos más ambiciosos -como el de los tablets y el de los smartphones- y, como señalan en Engadget, con un logro realmente notable: haber logrado vender nada menos que 100 millones de unidades.