Aún así, no todos los datos son malos para LG. De hecho, en el mercado smartphones ha conseguido su mejor marca desde que entró con la venta 10,3 millones de terminales en el primer trimestre del año. Todo ello gracias a su Optimus G y el Nexus 4 de Google. En este terreno son optimistas y esperan seguir creciendo con la fuerza de nuevos modelos como el Optimus G Pro para este trimestre.
Pero LG no es solo un fabricante de sus propios productos sino también de otras marcas a las que suministra pantallas. De hecho, se calcula que el 30% de su negocio viene de la mano de Apple. Una cifra bastante elevada que repercute directamente en los números de LG. Así, teniendo en cuenta que el gigante de Cupertino ha visto tocados sus resultados, es lógica la séptima caída trimestral consecutiva del surcoreano.
La dependencia de Apple es tan elevada para LG que cualquier mal dato tendrá consecuencias en los propios resultados. Una relación que con el panorama negativo en los televisores y la fuerza de otros en movilidad es más que peligrosa. Más aún cuando se espera que los pedidos de pantallas para dispositivos Apple sigan cayendo debido a la baja demanda.