Según esta fuente, uno de los nuevos iPhone sin llamarse así tendría una pantalla de 4,7 pulgadas -bastante pequeña si lo comparamos con los últimos phablets del mercado– con Gorilla Glass. Además, integraría una cámara de 10 megapíxeles y sería más delgado que sus anteriores hermanos. El segundo modelo contaría con una pantalla de 5,6 pulgadas.
De momento, como siempre en Apple, son rumores. El nuevo iPhone todavía no tiene nombre ni sabemos cómo será realmente. Tendremos que esperar a la siguiente keynote de Apple que podría ser en junio o septiembre-octubre.