35 millones de españoles utilizan WhatsApp. Una cifra que llega a los 500 millones si miramos el cómputo mundial. La aplicación ha conseguido reunir una gran masa de usuarios que hablan, comparten contenidos y piden recomendaciones. ¿Es el momento de pensar en WhatsApp como un lugar para vender? ¿Qué problemas comerciales puede haber?
Algunas empresas utilizan la aplicación de mensajería de Facebook como una pata más del servicio de atención al cliente. Ya no es raro hablar con el mécanico, informático o marmolista vía WhatsApp para saber a qué hora va a venir o cuánto nos va a cobrar. Entonces ¿Por qué no dar un paso más?
El crecimiento que parece imparable del comercio electrónico va muy unido a los smartphones. Cada vez más usuarios utilizan su teléfono inteligente para comprar, buscar información o pedir recomedaciones. Unir los dos mundos es solo un paso más que ya comienza a entenderse.
La idea ya ha tomado forma en algunos casos de éxito con competidores de WhatsApp. Es el caso de Huawei que ha conseguido vender 550.000 unidades de su smartphone Huawei Honer gracias a una acción llevada a cabo a través de WeChat en China. El mismo método utilizó Xiaomi para vender de forma express su smartphone Mi-3.
Sin embargo, salvo estos casos aislados de acciones muy puntuales, todavía las aplicaciones tipo WhatsApp no son plataformas para vender consolidadas. De momento, tienen que solucionar ciertos asuntos para que la venta se convierte en una realidad.
Viendo la realidad de WhatsApp puede parecer que cualquiera que no intente vender o explorar esta vía es un necio. Nada más lejos de la realidad ya que la aplicación tiene varias trabas que todavía hay que solucionar. Veamos punto por punto:
Mientras tanto se pueden buscar ideas creativas para salvar estos obstáculos. Está claro que WhatsApp puede convertir en una herramienta de interesante estudio, sobre todo, en pequeños vendedores. Una forma directa e inmediata para hablar con los clientes. Las vías de exploración están ahí pero ¿Se llegará a vender vía WhatsApp?