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VMware apuesta por la seguridad con la compra de Lastline

En un paso adelante en su visión de seguridad intrínseca, VMware ha anunciado la compra de Lastline, una compañía especializada en protección antimalware.

VMware sigue adelante en su objetivo por reforzar la seguridad de sus clientes y para ello ha anunciado una nueva adquisición en este ámbito. Se trata de la compra de Lastline, firma especializada en detección y respuesta de red y antimalware.

El acuerdo de adquisición, que está previsto que se cierre el próximo 31 de julio, se produce justo después de que VMware cerrase el pasado agosto otra compra en este campo, la del proveedor de protección endpoint Carbon Black por 2.100 millones de dólares.

Como apunta Tom Gillis, vicepresidente senior y director general de la unidad de negocios de redes y seguridad de VMware, las capacidades de análisis de malware de Lastline proporcionarán una fuente crítica para la plataforma Carbon Black EDR.

Este es un importante paso adelante para la visión de VMware de seguridad intrínseca ya que nos permitirá aprovechar aún más los atributos intrínsecos de nuestra plataforma de virtualización para proporcionar capacidades de seguridad innovadoras.

Gillis sostiene que el objetivo de VMware con esta compra no es replicar lo que existe hoy en día, sino crear soluciones de seguridad que puedan ofrecer de manera única, que abarquen desde el corazón del centro de datos hasta los usuarios remotos y usuarios móviles en casa o en movimiento.

Una combinación para avanzar en seguridad

La transacción ya ha recibido la aprobación de las directivas de ambas compañías, pero está sujeta aún a la aprobación de las distintas autoridades reguladoras, algo que se prevé que se agilice para que la compra se cierre durante el segundo trimestre fiscal de VMware que finaliza el próximo 31 de julio.

Una adquisición de la que en VMware están muy satisfechos ya que el sistema de Lastline detecta el doble de la cantidad de archivos maliciosos que un sistema basado en firmas, analizando más de cinco millones de muestras de archivos a nivel mundial.

De esta forma, la combinación de VMware NSX y Lastline derivará en una profunda visibilidad del tráfico de red y realizar un análisis a gran escala para avanzar en su seguridad.