Aunque la presencia de Intel en el mercado smartphone es prácticamente anecdótica hasta el momento, la compañía norteamericana espera que Merrifield le sirva para conseguir parte de un mercado que domina ARM. La necesidad de deshacerse de la dependencia del PC, un sector que está en decadencia, y las últimas declaraciones de directivos de primer nivel, sugieren un cambio de rumbo importante en la estrategia mobile de Intel.
Sobre el equipo en sí, sabemos de momento que cuenta con pantalla de 4 pulgadas e incluye una especie de sensor hub integrado, que los desarrolladores podrán utilizar para ofrecer servicios personalizados a los usuarios vía apps. Lo mejor, es que este nuevo equipo ofrece un rendimiento un 50% superior al de sus predecesores. Arranca una nueva era, sin duda.