Apple ha contratado al vicepresidente de ventas de la firma suiza de relojes de lujo Tag Heuer, Patrick Pruniaux, para apuntalar el lanzamiento del iWatch.
Fichaje de relumbrón que confirma -por si había alguna duda- el desarrollo de un reloj inteligente Apple y que sigue a otras contrataciones de ejecutivos de marcas de lujo como Angela Ahrendts de Burberry y Paul Deneve de Yves Saint Laurent.
Los analistas consideran que no es probable que el iWatch tenga incidencia en las ventas de la gama alta de relojes clásicos aunque sí en la gama media por debajo de los 1.000 dólares, si se alcanzan las previsiones de Apple para el iWatch, con ventas anuales de 65 millones de unidades.
Un iWatch cuyo desarrollo cuenta con 100 ingenieros y diseñadores de Cupertino lo que muestra la ambición de la firma para el que sería el nuevo gadget estrella, que anunció el CEO Tim Cook como una “nueva categoría de producto”.
El iWatch estaría siendo fabricado por Quanta Computers. No se conoce nada de su diseño, si será tipo reloj o pulsera, aunque los rumores apuntan a una pantalla táctil de 2,5 pulgadas. Estaría motorizado por un derivado del menor potencia del SoC A8 y contaría con Bluetooth 4.0 y Wi-Fi para comunicación inalámbrica entre el dispositivo y productos como el iPhone.
Sí es segura una clara orientación a la salud y el deporte tanto por la presencia de sensores dedicados como de aplicaciones incluidas en el nuevo sistema operativo móvil iOS 8 que permitirían monitorizar el ritmo cardíaco y nuestra rutina deportiva. Contaría con soporte especial para el asistente personal Siri por sus posibilidades de interacción conversacional mediante lenguaje natural.
Un producto ambicioso que estaría disponible el próximo otoño en medio de la gran explosión del mercado de dispositivos conectados, wearables.
