LG ha anunciado la salida del mercado chino de su división de móviles. Una respuesta a los 192 millones de dólares de pérdidas anunciadas por la división en la última presentación de resultados financieros y en contraste con los buenos datos globales especialmente por la venta de televisores.
Medios locales explican la salida por el aumento de competencia de marcas locales como Huawei, OPPO y Xiaomi, que hemos visto reflejados en los últimos datos para cerrar 2017. Ciertamente el mercado chino es durísimo, pero creemos que la situación es global y la realidad es que muy pocos fabricantes hacen negocio con la venta de móviles inteligentes.
Ejemplos tenemos unos cuantos comenzando por los actores que dominaban el mercado del móvil antes de la entrada de Apple, como Nokia, Motorola o BlackBerry, que han sufrido operaciones de venta o reestructuración para no desaparecer del mercado. Por no hablar del fiasco de Windows Phone a pesar de tener detrás a Microsoft. Tampoco hay un negocio sustancial para otras grandes como Sony o HTC, cuando no registran periodos de pérdidas como la misma LG.
En 2015, la prensa económica ofrecía un titular inquietante: “Apple acaparaba el 92% de beneficios del mercado smartphone”. Y era curioso teniendo solo el 20% de cuota de mercado y ofreciendo un par de modelos nuevos en su catálogo. Desde entonces, poco ha cambiado y Apple -a pesar de perder cuota de mercado en ventas- sigue llevándose casi toda la tarta, apoyándose en los altos precios de los productos y en una multimillonaria App Store.
Frente a Apple, tan solo Samsung y algunos fabricantes chinos parece hacer negocio con las ventas de móviles inteligentes. Y la situación se va a complicar porque por primera vez en diez años, en 2017 se redujeron las ventas.
La saturación en algunas regiones, la falta de innovación y la subida de precios, no motivan a unos usuarios que -como ocurre en el mercado del PC- cada vez retrasan más el cambio de su smartphone y lo de las renovaciones casi anuales ya han pasado a la historia.
A pesar de la caída de ventas el smartphone seguirá siendo el producto estrella de la tecnología mundial, pero su impacto no será el de años anteriores y nos tememos que veremos más salidas de fabricantes de algunas regiones ante la competencia y la falta de negocio para la mayoría.
