El canal TI europeo se dirige hacia un crecimiento del 10%

El segundo trimestre de este año se vislumbra con optimismo entre los distribuidores europeos. El canal TI se encuentra en una buena senda que le dará un periodo de crecimiento de en torno al 10%, según las previsiones de Context. Una aceleración que ya se vino dando el año pasado en plena ola pandémica, pero que parece que continuará todo este 2021.

La tecnología vuelve a demostrar su potencial en una época de crisis económica como la que vivimos. Y es que parece que el canal TI seguirá aumentando su negocio a buen ritmo gracias a categorías que ya fueron claves el pasado año como la movilidad o el teletrabajo. A estas se añadirán otras como los sobremesa, los proyectos de infraestructura que en 2020 se quedaron más aletargados, y las telecomunicaciones.

Las previsiones de la consultora apuntan así a un segundo trimestre con subidas del 10%, después de dos trimestres también de crecimiento; 8,5% y 8%, respectivamente.

Suministro en entredicho

El único pero que se puede poner a la buena situación que vive el sector tecnológico es el de la crisis de suministro de nichos como las tarjetas gráficas. Los problemas que ya llevan tiempo viéndose en el sector, parece que se recrudecerán durante la última parte de año lo que consecuentemente afectará a las ventas.

Aunque es díficil calcular cuánto afectará al canal TI, lo cierto es que tanto fabricantes como mayoristas convienen en una realidad: los problemas de inventario de componentes o pantallas afectarán a todos los segmentos.

Aún así, en los peores escenarios posibles, los crecimientos parecen que están asegurados. En este sentido, la consultora cree que el canal TI podría crecer, como mínimo, un 7% en el segundo trimestre, un 3% en el tercer oy un 4% en el último periodo de 2021. Todo ello gracias al auge de los portátiles y la migración cloud que marcarán tendencia durante todo este año.

Todo esto nos hará llegar a un 2022 donde desde Context sigue reinando el optimismo por la vista puesta en los Fondos de Recuperación Europeos que irán destinados, en gran medida, a proyectos digitales.