A pesar de la disminución del 10% en el gasto en 2020, el mercado de centros de datos se recuperará en los próximos cuatro años y ya el próximo año veremos una leve recuperación.
Si bien este año el gasto en infraestructura para centros de datos se contraerá como consecuencia de la incertidumbre económica, las previsiones que maneja Gartner apuntan a un crecimiento de cara al próximo año del 6% hasta alcanzar los 200.000 millones de dólares.
Un aumento que la consultora confía en que siga evolucionando en los próximos cuatro años. Para a consultora, actualmente las prioridades de la mayoría de las organizaciones pasan por mantenerse a flote en momentos difíciles como los actuales, lo que hace prever que la inversión en centros de datos se retrasará hasta que el mercado entre en recuperación.
Este año se paralizarán el 60% de la construcción de nuevas instalaciones ya planificadas
Las estimaciones también apuntan a que los grandes centros de datos harán una pausa y reanudarán sus planes de expansión ya de cara a finales de este año o principios del próximo, mientras que los hiperescaladores seguirán con sus planes de expansión global ante las continuas inversiones en la nube pública.
Para Gartner, gran parte de la demanda que se está viendo disminuir este año regresará en 2021. De momento, todos los segmentos de infraestructura del centro de datos estarán sujetos a medidas de contención de costes y se espera que los compradores empresariales extiendan los ciclos de vida de los equipos instalados.
Ante el impacto que la COVID-19 en muchos sectores, este año se paralizarán más del 60% de la construcción de nuevas instalaciones que ya estaban planificadas, por lo que los ingresos por infraestructura del centro de datos disminuirán un 10,3% este 2020. Se espera que el gasto del usuario final crezca en un solo dígito a partir de 2021.
Con estas perspectivas, desde Gartner apuntan tres recomendaciones para los responsables de infraestructuras para centros de datos, los cuales deben recuperar las oportunidades y priorizar un grupo selecto de clientes nuevos y existentes.
En primer lugar, capacitar a la fuerza de ventas de la organización para que se relacione con el director financiero (CFO) y el director de adquisiciones en las iniciativas de optimización de costes, como a la hora de renegociar contratos de TI, optimizar los costes de la nube y consolidar las TI.
También puede ser de gran ayuda elaborar un manual de estrategias que ayude a los proveedores de tecnología a comprender el impacto de la COVID-19 en las distintas industrias para recomendar elementos de acción a corto y medio plazo para los proveedores.
Asimismo, invertir en un nuevo modelo de lanzamiento al mercado para que los nativos digitales impulsen la innovación puede ser de gran ayuda y así impulsar la TI híbrida y los precios basados en el consumo para mejorar la participación mental con los nativos digitales.
Imagen inicial | Paul Hanaoka