Instalar o utilizar aplicaciones, sistemas o servicios sin supervisión de la empresa es una práctica habitual entre los trabajadores. La antesala de un problema de gestión tecnológica que puede ser el camino de entrada a ataques o ineficiencia productiva. Como partners, ¿Somos consciente de la oportunidad?
El denominado como Shadow IT es una realidad desde hace mucho tiempo evidente debido a la democratización de herramientas como Dropbox, Gmail o Skype. Soluciones que pueden aportar valor dentro de la estrategia de una organización, pero pueden dar muchos problemas al utilizarse a nivel individual.
Un estudio de Logicalis extraía que el 66% de los CIOs consultados en el mundo invirtieron más de la mitad de su presupuesto en medidas tecnológicas. En Europa, el porcentaje de directivos preocupados por el IT crece hasta el 80%. Pero no siempre están enfocados en resolver temas de fondo.
De hecho, pocos son conscientes de que el Shadow IT está ahí. A nivel global, el solo el 31% declara que frecuentemente se utilizan aplicaciones fuera de su control, mientras que en Europa se baja hasta el 19%. Solo Latinoamérica sobresale por encima de la media con un 51%.
Solo el 19% de los CIOs europeos es consciente del Shadow IT
El papel del partner
Y es que el Shadow IT no entra dentro de sus deseos de responsabilidad. Los CIOs se quieren dedicar a la planificación tecnológica estratégica para el negocio. Un deseo que se escapa de la verdadera situación en la que viven donde la mayor parte del tiempo lo dedican a involucrar a otros departamentos (24%) y resolver incidencias cotidianas (21%). Solo un 21% está dedicado a planificar.
Y es ahí donde debe entrar en juego los partners tecnológicos. Proveedores que les ayuden a entender las innovaciones que están surgiendo y cómo se pueden implementar cambiando los procesos para ser más eficientes y productivos. Cambios que puedan acercarse más a los trabajadores y clientes finales.
Sin embargo, no es fácil entrar en ese terreno. Hay poca delegación de tareas ya sea por culpa de los responsables tecnológicos o la propia organización empresarial. Solo el 2% de los CIOs pueden dejar en manos de sus proveedores entre el 90 y 100% de la tecnológico corporativa. Lo normal es que el porcentaje se sitúe entre el 10 y 30%.
Aún así, los CIOs tienen claro que deben desarrollar servicios para atender las necesidades internas y externas de las empresas. Que planificar ese portfolio es su tarea. Una mentalidad que trae consigo cambios que no siempre pueden ser ejecutados por el departamento tecnológico.
Transformaciones en áreas claves como la movilidad, social, analítica, cloud son claves para gran parte de los responsables tecnológicos. También lo comienza a ser la inteligencia de negocio y la era de la definición de software (SDx) que será un proyecto a abordar tarde o temprano para el 83% de los CIOs.
Con todo ello, el partner debe buscar su hueco en esta oleada de transformación digital. Demostrar su valor cambiando los modelos hasta ahora impuestos como especialista en las áreas mencionadas. Dar luz a ese Shadow IT que muchas empresas no saben ni que tienen detrás y enseñarles cómo ser más con menos. ¿Estás preparado?
