El coche autónomo es una tendencia al alza en una industria del automóvil que está pasando por un gran proceso de inmersión tecnológico, en el que trabajan las compañías del sector y también las grandes tecnológicas, incluida Apple con
Coche eléctrico, no contaminante, conectado, autónomo y también compartido según destaca un estudio de la firma de análisis ABI Research, que asegura que en 2030, 400 millones de personas en todo el mundo utilizarán un coche autónomo compartido para su movilidad.
Una vez que la tecnología y funcionamiento de los coches autónomos ofrezcan la suficiente seguridad, la gente se preguntará si es necesario tener un coche propio, comentan. En lugar de cargar con los costes de estacionamiento, mantenimiento y seguro de un coche que se encuentra inactivo el 90% de la jornada, los clientes optarán por una plataforma de coche compartido basado en suscripción, dicen desde ABI.
Pasadas semanas vimos los inicios de esta tendencia cuando GM y Lyft anunciaron que iban a ofrecer alquiler de coches de bajo costo para los conductores de la firma alternativa de bus y taxi.
Ciertamente, esto no es compartir el coche en el sentido tradicional. Sin embargo, los servicios de movilidad como Lyft (o la polémica Uber) jugarán un papel importante en el coche autónomo compartido y algún día serán indistinguibles de un modelo de negocio de alquiler como Zipcar.
El desarrollo de coches inteligentes está en marcha y más allá de los grandes fabricantes de automóviles, la entrada de las grandes tecnológicas en el sector asegura importantes cambios en un negocio de 50.000 millones de dólares.
