Internet de las cosas sigue creciendo a buen ritmo. Mientras tanto, las previsiones de IDC apuntan a que cerraremos este año con un negocio IoT en Europa Occidental de 145.000 millones de dólares alcanzando los 290.000 en 2020. El crecimiento interanual previsto es de casi el 19% siendo la manufactura, servicios y transportes las principales industrias propulsoras.
Europa Occidental será una de las regiones que propulse en IoT. Dentro de los sectores verticales será la manufactura con 28.700 millones de dólares la principal fuente de ingresos. Por detrás, los servicios y el transporte con un negocio cercano a los 18.000 millones y 17.500 millones de dólares, respectivamente. No obstante, también será vital en el futuro de la tecnología doméstica o el retail. Este último nicho incrementará la demanda de IoT un 130% y será junto a los seguros (una subida del 138%) el vertical que más rápido crezca.
Manufactura, servicios y transportes guiarán el negocio IoT
El auge de las soluciones en este terreno hará que las compañías se interesen por invertir. Pero como comenta Lionel Lamy, co-líer del área IoT europeo para IDC: «es necesario dar el mensaje más claro posible a los consumidores para que entiendan su papel dentro del universo IoT con un ecosistema de partners que emergerá de las principales referencias». Así, el papel del partner especializado o global será más vital que nunca.
Pero lo más espectacular del IoT es que no es solo un negocio en si mismo sino que abre la puerta a muchos más. El mundo interconectado se enfrenta no solo a esa conexión sino también a retos en el terreno de seguridad o la gestión de información generada. De ahí que otros segmentos tecnológicos se vean beneficiados de forma directa. Una ventaja y reto al mismo tiempo para todo el canal de distribución.
