Lo que hace unos años era impensable, hoy es una realidad. La transformación digital ya es una prioridad para el 31% de los CEOs consultados por Gartner. La encuesta realizada pone de manifiesto la relevancia de este concepto en los negocios donde las mejores tecnológicas están por encima de las innovaciones en la corporación, cliente o producto.
Como apreciamos en la imagen, los CEOs consultados valoran por encima de todo (58%) la capacidad de crecimiento de la organización. En segundo lugar, el 31% cita todo lo relacionado con la innovación tecnológica. Ya por detrás queda lo relativo a la propia empresa (23%), clientes (21%) y producto (20%). Mucho más retrasado en las prioridades de los jefes quedan las finanzas (16%), empleados (16%), costes de gestión (11%) y marketing (8%).
El 56% de los CEOs están transformando el negocio
Y es que la tecnología es un objetivo en sí mismo. Un reto que los máximos dirigentes de las empresas ya entienden; el 47% lo están valorando para hacer procesos y el 56% están inmersos en ello. «Los CEOs están entendiendo los beneficios de la estrategia de los negocios digitales que están mejorando», comentan desde la consultora.
El 20% de los responsables están tomando el «digital first» como una aproximación para cambiar las empresas. Un primer paso para la transformación que invita a mirar el optimista futuro que se plantea con tendencis como Internet de las cosas, servicios innovadores o plataformas digitales.
En la punta del iceberg
Pero entender que el mundo corporativo está cambiando no siempre significa que las compañías lo hagan de la noche a la mañana. El proceso de transformación digital solo ha mostrado la punta del iceberg. Una cabeza visible donde los dirigentes están buscando la forma de cambiar pero casi la mitad no sabe cómo medir la repercusión o los efectos.
Además, muchos CEOs consideran que la transformación digital es básicamente contar con una mente abierta, emprendedora y colaborativa. Una visión que es hora de poner sobre la tierra con la ayuda no solo del equipo interno sino también de compañeros tecnológicos externos. Implicar a partners, proveedores y empleados será el camino para ver este iceberg completo.
