Las unidades de estado sólido reemplazarán a los discos duros como unidades estándar de almacenamiento en el mercado mainstream en un plazo de tres a cinco años, según Digitimes Research.
El aumento de precios tras el terremoto de Japón y las inundaciones en Tailandia han provocado un encarecimiento del precio de los discos duros.
Por contra, el sector de las SSD se encuentra en plena guerra de precios, reflejando la caída de costes de las memorias flash y ante el interés de las grandes del sector de acabar con las productoras más pequeñas.
Las ventajas de las SSD frente a los discos duros son múltiples, desde el rendimiento, ruido por la ausencia de partes metálicas y también consumo. Desventajas como su capacidad se están reduciendo así como el factor precio, con un coste por debajo del dólar por Gbyte. Todavía muy superior al de los discos duros aunque reduciéndose progresivamente y con un coste final que puede atraer a fabricantes y compradores, especialmente en sectores como ordenadores portátiles.
