Pese a que el comercio electrónico sigue creciendo En España, no lo hace tanto como podría. Todavía hay muchos frenos que hacen que los usuarios se decanten por otras vías de compra. Nielsen asegura que el temor a ser estafados, los costes de envío y el desconocimiento en el uso de las tiendas on-line son las principales razones.
Tanto en España como en Europa los miedos frente al comercio electrónicos son los mismos con valores similares. En nuestro país el 43% de los consumidores asegura que no compra vía Internet porque no confía en que no sea defraudado y también por los costes de envío. Además, el 24% considera que las webs todavía son muy confusas. Las barreras se repiten en la Unión Europea donde el 41% teme el fraude, el 37% no compra por el precio del envío y el 28% no entiende la tienda on-line.
El estudio de Nielsen también habla de las categorías en las que más se compra. Todo lo relacionado con los viajes y ocio es lo más demandado: reservas hoteleras y billetes de avión (37%), entradas de espectáculos (33%). Paradójico es que sólo el 15% de los consumidores adquiere hardware, videos, DVD o videojuegos a través de Internet, porcentaje que baja al 14% en el caso de programas informáticos.
La penetración móvil en España también es objetivo de estudio en el informe. De hecho, es el primer país en intención de compra on-line a través de dispositivos móviles, un 38%.
La investigación demuestra que todavía hay mucho que hacer. Pese a que el comercio electrónico ya es una fuente importante de ingresos en nuestro país, todavía puede serlo mucho más. Mejorar en la seguridad, logística, usabilidad y accesibilidad son claves para conseguir que estos compradores inseguros confíen en la Red de redes.
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