380 millones de usuarios podrían estar accediendo a Internet a través de 4G/LTE en todo el mundo, según las estimaciones de Digitimes. Una cifra que va lentamente consolidando esta nueva conexión, sobre todo, en algunas regiones como Norteamérica o Asía-Pacífico. Pero finalmente gana seguidores y operadoras que ven las virtudes de ofrecer este nuevo estándar.
Las previsiones del medio oficioso de la industria taiwanesa apuntan a que el último trimestre del año veremos un crecimiento de usuarios del 14,9% en su tasa intertrimensal y de un 89,6% en la interanual. Subidas importantes que estarán centralizadas en la zona norte de América, donde ya suponen el 33% de las conexiones con 127 millones de usuarios, y Asía-Pacífico. Ambas regiones se llevan el 80,5% de la cuota 4G a nivel mundial.
Europa tan solo representa el 15,5% de las conexiones LTE. ¿Por qué? Por un lado, las operadoras que no han desplegado la infraestructura necesaria para el despegue. Y este argumento lleva al otro. La falta de dispositivos móviles que soporten esta conexión. Un hecho que no sucede en Estados Unidos donde es raro ver un smartphone o tablet sin 4G/LTE.
Los valores son similares a los proporcionados por 4G Americas. La compañía espera que para finales de este año se llegue 350 millones de conexiones LTE a nivel mundial. Una previsión que se basa en las subidas experimentadas; de las 104 millones que había en marzo de 2013 se pasó a 245 millones en marzo de este año, más del doble en un año.
¿Y en España?
Aunque la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia no ofrece valores sobre las líneas 4g/LTE que hay en España, podemos decir que todavía son una minoría por el poco tiempo que llevan en marcha. Las operadoras comenzaron con la adaptación a estas conexiones durante el año pasado.
Fue en 2013 cuando la cobertura 4G/LTE llegó al 60% de la población española, según datos de la CNMC. Todo ello gracias al despliegue de infraestructura por parte de Movistar, Vodafone, Orange, Yoigo, Cota y NEO. Y con ella llegaron las ofertas para particulares y empresas que invitan a utilizar una red más rápida, segura y eficiente.
Pero como decimos el despliegue todavía no es mayoritario y, seguramente, mucho menos los usuarios que apuestan por las redes 4G/LTE viendo que en Europa solo representan el 15% del mercado.
4G/LTE en empresas ¿Para qué?
Aunque las operadoras han intentado «vender» las conexiones 4G/LTE tanto en el ámbito corporativo como en el doméstico, lo cierto es que tiene mucho más sentido en el primero. Y quizás es ahí donde hay un nicho que explorar y al que demostrar que este nuevo estándar puede ser una pata de una solución de telecomunicaciones completa.
Por sus propias características, las redes 4G/LTE son una evolución que aporta mayor facilidad de implementación en el proveedor de comunicaciones. Pese a que la infraestructura tiene que ser nueva, hay actualizaciones como E-UTRAN que ha hecho reducir los costes y complejidad de los equipos.
En el lado de los consumidores, sobre todo, corporativos permite adaptar el ancho de banda al uso dado, trabajar en velocidades más altas y diferentes bandas frecuenciales además de ser más flexible y eficiente. También permite una mejor conexión en transportes, clave para usuarios que viajan mucho en tren o autobús.
Así, este tipo de conexiones, que se pueden ofrecer en un paquete integral de comunicaciones, permiten a las empresas ofrecer a sus trabajadores o clientes un servicio más productivo, rápido y fiable.
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