Secura cerró un 2018 con un crecimiento medio del 81% y duplicando su facturación en servicios gestionados de seguridad. El integrador madrileño ha superado así los objetivos marcados entorno a la administración de soluciones. En 2019 espera continuar la senda alcista en un año de celebración por los 10 años de vida de la compañía.
2018 ha sido un año de consolidación. Después de un 2017 de éxito, la compañía ha conseguido adquirir una mayor visibilidad dentro del mercado y, sobre todo, alrededor de los servicios gestionados de seguridad.
Aceleración de los servicios gestionados
Y es que el mercado de la ciberseguridad, muy dinámico y competitivo, está en constante cambio; las empresas ya no demandan los mismos productos y servicios ni los consumen de la misma forma, algo que Secura ha captado, adaptando su estrategia.
En este sentido, Laia Salas, CEO de Secura comenta:
Siempre hemos detectado una necesidad altísima de servicios gestionados en la gran cuenta, sin embargo, es durante estos últimos años cuando la demanda ha alcanzado pleno auge. Esto ha supuesto una oportunidad estratégica que hemos aprovechado para cubrir las necesidades que nos demandan nuestros clientes y aportar nuestro máximo valor».
De hecho, durante este año Secura ha transformado el SOC tradicional en un Centro de Gestión de la Seguridad. Así se ha adaptado de forma activa a la demanda y los nuevos retos que se plantean en ciberseguridad.
Desde este Security Guardian, el integrador diseña un modelo de servicios gestionados completamente a medida de las necesidades de cada cliente; «la especialización no está reñida con la flexibilidad», argumenta la portavoz. Una gestión completa y activa que explota al máximo el potencial de las soluciones de seguridad para que el cliente se pueda centrar en su negocio.
Parte del éxito también ha estado en los acuerdos con grandes corporaciones nacionales e internacionales que han confiado en la administración de su seguridad por parte de Secura.
Las previsiones para el próximo año apuntan a que continuará el crecimiento del sector, impulsado por la evolución de amenazas, lo que motivará una mayor demanda de soluciones y servicios de seguridad.
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