La moneda virtual más famosa sigue ganando puntos entre las tiendas. Sin embargo, lejos de ser la revolución anunciada allá por 2009 cuando comenzó a funcionar, parece que el éxito de Bitcoin se ha ido diluyendo hasta quedarse en una cuerda floja pero, al menos, constante.
Desde diciembre de 2013, fecha en la que Juniper Research empezó a analizar la moneda, su devaluación ha sido prácticamente constante. De hecho, la firma analista calcula que su valor ha caído un 20% desde 2003.
No obstante, la tendencia a la baja parece que ha tenido un parón durante este año. Desde inicios de 2015, Bitcoin ha conseguido mantenerse casi constante, a diferencia de la estrepitosa caída del rublo o incluso la inestabilidad del euro.
De hecho, durante lo que llevamos de año Bitcoin ha movido algo menos de 12.400 millones de dólares. Eso sí, unas transacciones que suponen un 25% menos que las realizadas en 2014.
El futuro de Bitcoin
Aunque predecir el porvenir de la moneda virtual es prácticamente imposible, desde Juniper consideran que Bitcoin se quedará como un método de pago de reserva para 2030. Así, su uso seguirá siendo modesto pese a los apoyos de la comunidad on-line.
De momento parece que la previsión no va desencaminada. Cada vez más vendedores añaden esta moneda e incluso grandes como PayPal, Dell o Microsoft se han unido a esta tendencia. Sin embargo, todavía los compradores no la ven como la opción de pago favorita.
Además, a Bitcoin cada vez le salen más competidores. Ripple es uno de ellos. Una alternativa que pisa con fuerza en el terreno de las finanzas virtuales pero no es el único. Los servicios de pagos móviles también crear sus propios sistemas para que su negocio sea perfecto.
En este contexto vive Bitcoin. Un momento complicado pero a la vez interesante que solo el futuro nos dirá cómo termina. ¿Cómo una moneda residual? ¿Cómo un método asentado? ¡Opina!
