La gama Black de WD es sin ningún género de duda la mejor opción para todos aquellos que busquen un disco duro capaz de ofrecer un rendimiento muy elevado, fiable y con un precio realmente competitivo.
Sí, esta gama es capaz de cubrir las necesidades de los usuarios más exigentes y de hecho es muy utilizado para montar equipos de «gaming», dada su excelente relación precio-rendimiento-capacidad.
Echando un vistazo a sus especificaciones vemos que toda la serie Black de WD viene equipada con 64 MB de caché, doble procesador integrado que actúa a modo de controlador, maximizando el rendimiento, y una velocidad de giro de 7.200 RPM. Lo expuesto redunda en una mejora de rendimiento que consigue llevar a este pequeñín hasta unos impresionantes 158,8 MB/s de velocidad de lectura (resultado en Aida 64), superando claramente a productos de otros fabricantes.
Profundizando un poco en la memoria debemos destacar que se trata de caché dinámica, gracias a la cual mejora sensiblemente el rendimiento en tiempo real al optimizar la asignación de la caché entre las lecturas y escrituras, evitando congestiones en el tráfico de datos.
Como no podía ser de otra forma la gama Black de WD funciona bajo la interfaz SATA 3 6 Gbps y se ofrece en modelos que van desde los 500 GB hasta los 4 TB, una oferta lo bastante amplia como para cubrir las necesidades de cualquier consumidor.
A nivel tecnológico toda la gama cuenta con la tecnología NoTouch, de la que ya os hemos hablado anteriormente y gracias a la cual se consigue alargar la vida útil del producto, reduciendo el desgaste del cabezal al evitar que éste entre en contacto con el disco duro.
Pero hay más, y es que los modelos de 1 TB y de 2 TB incorporan además la tecnología StableTrac, que supone la fijación del eje del motor en ambos extremos para reducir las vibraciones provocadas por el sistema y estabilizar los platos, lo que se traduce en más precisión en las operaciones de lectura y escritura y proporciona un rendimiento constante y estable.
Teniendo en cuenta que es posible encontrar, por ejemplo, el modelo de 1 TB por poco más de 70 euros podemos concluir que se trata de un producto redondo que, para rematar, viene acompañado de nada menos que cinco años de garantía.