La finalización del soporte técnico de Windows XP está a la vuelta de la esquina (8 de abril) dejando al sistema operativo en una situación de inseguridad evidente que será aprovechada por los ciberdelincuentes.
Si los aspectos de seguridad deberían ser un aspecto definitivo para una obligada migración a sistemas más modernos y seguros, la actualización no siempre será posible por el mismo hardware de unos equipos con Windows XP que al menos tendrán doce años de antigüedad, todo un mundo en tecnología.
De ahí la recomendación de actualizar no solo el software sino el hardware, con nuevos equipos que además de seguridad, aporten mayor productividad y unas posibilidades en todos los terrenos informáticos que no podrán ofrecer los viejos equipos.
Como incentivo, Microsoft ha comenzado una promoción que ofrece un descuento de 100 dólares a clientes de Windows XP por la compra de un equipo nuevo con Windows 8.1 de valor igual o superior a 599 dólares.
La promoción incluye modelos seleccionados de varias marcas y formatos y estará activada hasta el 15 de junio en las tiendas retail de Microsoft y también en su portal en línea para Estados Unidos y Canadá. La firma de software también ofrece 90 días de soporte técnico y herramienta gratuita para trasferencia de archivos. Un esfuerzo para migrar desde un sistema Windows XP que todavía cuenta con un 29 por ciento de cuota de mercado y que también está apoyando el canal mayorista y los fabricantes, con ofertas propias y completos programas de migración.
