Pese a todos los intentos con Windows 8 y su actualización Windows 8.1, Microsoft no ha conseguido ganarse a todos los usuarios que le gustaría. De momento, ambos sistemas operativos siguen creciendo pero a un ritmo mucho más lento que el de Windows 7. ¿Un fracaso para el gigante? ¿Es Windows 8 el próximo Windows Vista, según ya aventuraban algunos?
Los últimos datos de Net Market Share confirman este hecho. Mientras que Windows 8 cayó un modesto 0,07% en cuota, Windows 8.1 creció un 0,47% seguramente derivado de los usuarios que se pasaron a la actualización desde Windows 8. En total la combinación del Windows 8/8.1 se llevan poco más del 12% del mercado.
Mientras Windows 7 se sitúa con un poderoso 50% de cuota y subiendo a un ritmo del 0,79%. Así la subida con respecto al último software de Microsoft es evidente y reafirmar lo que se viene criticando a la compañía: Windows 8 no convence al usuario final. El hecho no es nuevo y precisamente esto puede ser lo más preocupante, que se convierta en una tendencia.
Quizás el mejor dato viene de la mano de Windows XP. Por primera vez en 13 años su cuota comienza a bajar gracias a las campañas de concienciación y el fin de soporte oficial de Microsoft. Ya representa menos de una cuarta parte del total, concretamente un 25,27%.
