Las máquinas expendedores de bebidas o comida son las más habituales que nos podemos encontrar en espacios públicos o empresas. Sin embargo, este método de venta rápida es extensible a otros sectores como el de la tecnología. De hecho, ya hemos visto como Saturn lo hacía con pequeños accesorios electrónicos o Google con sus juegos. Ahora, nos encontramos con un nuevo caso más curioso si cabe.
El proveedor de servicios de Internet, Skyroam, ha decidido utilizar las máquinas de vending para promover su oferta de hotspot de Wi-Fi. Así, ha utilizado aeropuertos de San Francisco, Las Vegas y Houston para establecer su dispositivo de venta. Los usuarios pueden comprar los servicios que dan cobertura en más de 100 países.
Aunque sus dispositivos, de venta on-line o en las tiendas físicas colaboradoras, cuestan unos 100 dólares. La nueva propuesta de Skyroam, instaurada en los aeropuertos, se basa en el alquiler de estos hotspot durante el tiempo que el comprador necesita. El precio es de 9,95 dólares por día. Una vez finalizado el servicio, el consumidor solo tendrá que enviar por correo el producto.
Momento y formato
Lo importante de esta iniciativa de Skyroam quizás no sea tanto la máquina en sí como la estrategia seguida. Al igual que ha hecho Snapchat con sus máquinas para vender gafas, el ISP ha sabido cómo, dónde y en qué formato vender sus servicios para dar valor. Tres puntos claves para conseguir que la estrategia comercial tenga un futuro.
Justo es ahí donde está la lección. Si tenemos un buen producto pero no estamos en el punto donde está nuestro público ni con las condiciones que necesita el cliente final, estaremos fallando. Evidentemente, equilibrar la balanza es complicado pero es la única forma de intentar conseguir el éxito.
