Si hace tres años los consumidores españoles cambian de móvil cada 16 meses de media, ahora lo hacen cada 20,5 meses. Lo revela la consultora Kantar Worldpanel advirtiendo que la tendencia a alargar la vida útil de un smartphone no es única de España; Estados Unidos, China, Francia, Alemania, Reino Unido e Italia siguen la misma línea.
No obstante, España es uno de los territorios donde el cambio se da antes. Por delante solo está China (20,2 meses) y Alemania (20,3). El promedio de los países europeos a la hora de renovar el móvil está en 21,6 meses. En Estados Unidos la cifra asciende hasta los 22,7.
¿Cómo rentabilizamos?
El alargamiento de la vida de un smartphone es una realidad palpable. Los precios, la coyuntura económica y la falta de innovaciones realmente importantes han creado un caldo de cultivo perfecto para que los consumidores se lo piensen dos veces a la hora de comprar un nuevo terminal.
Conscientes de esta realidad, el sector móvil lleva tiempo proponiendo opciones para incentivar el consumo y evitar que estos periodos de vida sigan creciendo.
Además de las continúas novedades con las que los fabricantes inundan el segmento móvil, canal y marcas han comenzado a moverse con otras ideas. Los famosos Día sin IVA que ya extiende a la movilidad, ofertas agresivas en fechas señaladas como Black Friday o directamente descuentos con la compra como los promovidos por Apple con su Plan Renove.
Sin embargo, no siempre es posible incentivar la compra por lo que también se han tomado otras medidas. Samsung lanzó su programa de reventa de móviles usados cuando Apple ya alquilaba terminales para maximizar la rentabilidad de un solo dispositivo en varias ocasiones.
Dentro del canal de distribución también han aparecido figuras dedicadas a esta venta que incrementará su demanda un 22%. Ejemplos nos los encontramos en Manzanas Usadas o Back Market, tiendas on-line dedicadas en exclusiva a la venta de dispositivos móviles de segunda mano reacondicionados.
