Alibaba anunció la semana pasada una alianza con Ford para vender vehículos eléctricos en China. Aparte de los grandes nombres involucrados, la parte más intrigante del anuncio fue la ‘máquina expendedora’ propuesta para realizar las ventas.
Y ahora podemos verla en vídeo. Como lees en el titular, el proceso es similar -guardando las distancias- al que realizamos para sacar un bote de refresco de una máquina expendedora. Eso sí, mediante un edificio futurista que parece una versión gigantesca de un juguete de simulación que podemos encontrar en Toys R Us.
Amazon hace tiempo que tiene buscador/venta de repuestos de automóvil y está vendiendo coches de Fiat Chrysler en algunas regiones desde hace un año. Está claro que las grandes firmas de comercio electrónico han encontrado un nuevo segmento de venta en los automóviles. Y si son ‘verdes’ y autónomos como señala la tendencia del motor, mejor.
Por ello no sorprende la estrategia del gigante chino Alibaba para vender coches. La novedad es la manera de hacerlo. El proceso se inicia cuando un cliente utiliza la app móvil de una de sus compañías, Taobao, para seleccionar un vehículo de sus gusto, probarlo y eventualmente comprarlo. Una vez seleccionada la motorización y color, la app realiza una autofoto del cliente y gestiona una prueba de conducción.
A partir de ahí, el cliente se dirige a una de estas ‘máquinas expendedoras’ gigantes y autogestionadas, que usa un sistema de reconocimiento facial (de ahí el selfie anterior) para autenticación y recogida del vehículo solicitado. El cliente tiene tres días para probar el vehículo antes de su entrega, prueba de otro modelo y decisión de compra.
Una experiencia novedosa que combina el comercio electrónico y una entrega física muy particular. Espectacular como puedes ver en el siguiente vídeo:
