Según una interesante previsión que nos deja la prolífica DigiTimes los vendedores chinos de smartphones que podemos considerar como de primer nivel (los más importantes) incrementarán sus envíos durante 2018.
Esto permitirá acelerar la consolidación de nuevas cadenas de suministro en China y al mismo tiempo implicará más presión para los vendedores internacionales y para los vendedores chinos de semartphones de segundo nivel.
Una de las firmas más importantes que del top de vendedores chinos de smartphones es Huawei, empresa que cerró 2017 con un crecimiento del 10,07% y un total de 153 millones terminales enviados. El gigante chino ha confirmado que reforzará su inversión en I + D para mejorar sus soluciones dedicadas a inteligencia artificial y realidad aumentada.
Lo mismo ocurrirá con Oppo y Xiaomi Technology, dos grandes del mercado chino, cuyos envíos en 2018 ascenderán a unos 100 millones de teléfonos inteligentes, aproximadamente.
Como ya vimos en este artículo el mercado smartphone cayó por primera vez en China en 2017. Fue una bajada mínima pero lo importante es lo que ésto representa, y es que el mercado chino ya no está capacitado para permitir grandes crecimientos por parte de sus principales vendedores de smartphones.
Esto obliga a las marcas chinas a adoptar una estrategia expansiva en avanzando en mercados emergentes aprovechando sus modelos comerciales integrados verticalmente, que cubren las operaciones de fabricación, gestión de la cadena de suministro, canal y marca.
Para triunfar en esos mercados es imprescindible ofrecer terminales con una buena relación precio-prestaciones, y en este sentido firmas como Huawei, Oppo y Xiaomi tienen productos muy competitivos. Prueba de ello la tenemos en la caída que ha experimentado MicroMax, una de las marcas de smartphones más importantes de la India, que ha visto como su cuota de mercado se reducía de un 30% a un 3% por el empuje de los terminales chinos.
