De acuerdo con los datos de IDC, el mercado de servicios de telecomunicaciones creció el pasado año a nivel mundial por encima de las previsiones. Sin embargo, el futuro se prevé menos halagüeño ante una inminente desaceleración económica.
El gasto mundial en servicios de telecomunicaciones y servicios de televisión de pago alcanzó los 1566 millones de dólares en 2021, lo que supone un aumento interanual del 1,6%. Así al menos se desprende del Rastreador mundial semestral de servicios de telecomunicaciones de IDC.
De acuerdo con la firma, se espera que el gasto mundial en servicios de telecomunicaciones y televisión de pago aumente un 1,4% en 2022 y alcance un total de 1.588 000 millones de dólares.
El informe apunta que 2021 se caracterizó por la rápida recuperación de la economía mundial tras la caída provocada por la pandemia de la COVID-19. Este entorno favorable contribuyó a un incremento del gasto en servicios de telecomunicaciones, por lo que el valor total del mercado a nivel mundial aumentó un poco más rápido de lo previsto originalmente.
La televisión de pago ha sido el segmento que ha tenido una mayor caída en los últimos meses
Una tendencia que fue común en todas las regiones del mundo. El mercado de Europa, Medio Oriente y África (EMEA) creció 0,2 puntos porcentuales más rápido de lo previsto en octubre de 2021; mientras que el de Asia/Pacífico creció 0,5 puntos porcentuales más rápido; y las Américas crecieron 1,0 puntos porcentuales más rápido.
Este crecimiento mayor al esperado también se registró en todos los segmentos de tecnología a excepción de la televisión de pago, algo que parece lógico teniendo en cuenta las personas pudieron pasar más tiempo fuera de sus hogares en comparación con el año anterior. Esto llevó a la cancelación de las suscripciones a los paquetes de televisión adquiridos durante el confinamiento.
Previsiones para el mercado de telecomunicaciones
El pronóstico que IDC lanzó en octubre de 2021 para el mercado mundial de servicios de telecomunicaciones y televisión de pago incluía un escenario de mayor recuperación (es decir, tasas de crecimiento aún más altas) en los años 2022 y 2023. Sin embargo, debido a nuevas circunstancias, con una inflación acelerada y el aumento de las tasas de interés de referencia por los bancos centrales llevará a un crecimiento económico más lento en los próximos años.
Esto ha llevado a que, si bien las nuevas previsiones siguen siendo optimistas, no lo son tanto como inicialmente, ya que las tasas de crecimiento en el primer semestre serán inferiores a las registradas el año pasado.
Para IDC, esta inflación debería tener un impacto positivo en este mercado: los operadores aumentarán sus tarifas, los clientes pagarán más y el valor total del mercado debería crecer más rápido de lo esperado.
Sin embargo, la inflación también genera un deterioro del poder adquisitivo de consumidores y empresas, provocando una disminución de la demanda. Las previsiones que se manejan es que el impacto de la inflación en el mercado de servicios de telecomunicaciones se extenderá durante los próximos años.
Asimismo, la guerra en Ucrania también tendrá un efecto negativo en el mercado de servicios de comunicaciones en EMEA. Afectará principalmente al mercado ucraniano, que experimentará un descenso considerable debido a la destrucción de la infraestructura de la red y al gran número de personas que abandonan el país. Pero el mercado ruso también caerá ya que la demanda local estará bajo presión debido a la recesión provocada por las sanciones internacionales. Por otro lado, la guerra tendrá un impacto positivo en los mercados de los países vecinos (Polonia, Eslovaquia y Rumania) que albergan un gran número de refugiados ucranianos.
Pero IDC también destaca que el impacto de la COVID-19 persiste y los bloqueos actuales en China y la posible aparición de nuevas variantes del virus en el resto del mundo podrían conllevar nuevos impactos, principalmente en la sección de servicios de datos fijos para empresas.
Si bien las oleadas anteriores de COVID no afectaron drásticamente el mercado global de servicios de telecomunicaciones, las interrupciones de la cadena de suministro están provocando la escasez de equipos de redes.
Y es que, si bien desde el inicio de la pandemia la industria de servicios de telecomunicaciones se ha mantenido muy estable y ha actuado como la columna vertebral de la economía global, permitiendo a las personas comunicarse, entretenerse y hacer su trabajo mientras estaban confinadas en sus hogares, ahora parece estar empezando a desacelerarse. Así lo explica Kresimir Alic, director de investigación de Worldwide Telecom Services. en IDC para quien las las mismas fuerzas que impulsaron el mercado también pueden empujarlo hacia abajo.
«Al igual que otros mercados, este no es inmune a los cambios en las tendencias económicas y fuerzas como la inflación y la recesión pueden cambiar rápidamente la forma de la curva. La inflación ya está sucediendo y las economías han comenzado a desacelerarse, por esa razón nuestra visión del mercado sigue siendo cautelosamente optimista».
Imagen inicial | Jeevan Katel
