No son los mejores tiempos para vender ordenadores y eso hace mella en los resultados. Prueba de ello son las cifras de Dell Technologies que han caído un 20% en el primer trimestre de su año fiscal 2024. En la debacle también ha tenido que ver la baja del negocio de infraestructura.
Dell Technologies ingresó 20.900 millones de dólares que suponen 5.190 millones de dólares menos que lo facturado en el mismo periodo de 2022.
Este descenso ha estado especialmente motivado por la bajada en la demanda de equipos que fue de un 23%. El negocio en esta categoría alcanzó los 12.000 millones de los cuales 9.900 millones provinieron de lo profesional y 2.100 millones del consumo. Pese a las descafeinadas cifras, el fabricante comentaba que su base instalada es de las más altas desde 2014.
En el área de la infraestructura, la compañía ha caído un 18% dejando un negocio trimestral de 7.600 millones de dólares. La caída no ha sido mayor en esta categoría gracias a la alta demanda en almacenamiento, donde alcanzaron los 3.800 millones de dólares, y servidores y networking.
Respecto a la situación del negocio, Chuck Whitten, COO de Dell Technologies comentaba:
«El entorno de demanda permanece siendo un reto y los consumidores son cautelosos con la inversión IT. Continuamos viendo una templanza en las mayores líneas de negocio en todas las regiones, tipos de clientes y la mayoría de los verticales».
Pese a los resultados, Dell Technologies auguraba una mejora de los resultados gracias a su batería de innovación y su propuesta as a Service Dell APEX que «expandiremos para dar más capacidades a todo el portfolio y simplificar el multicloud y edge computing a los clientes», apuntaba el directivo.
