Con una infraestructura de WiFi de las más obsoletas de Europa, España continúa evolucionando su red inalámbrica hacia estándares actualizados como WiFi 6 o 7. Sin embargo, todavía dos tercios de todas las conexiones encajan en WiFi 4 o WiFi 5.
Los datos, publicados por Sppedtest Intelligence, demuestran el avance de los nuevos estándares como WiFi 6. Una penetración que sigue creciendo lentamente en España, liderada por Digi que en enero de este año contaba con un 46,55% de la cobertura. Los grandes ISP (Orange, Movistar y Vodafone) se quedaban con la cobertura restante de WiFi 6, representando el 34,92, 19,13 y 13,83%, respectivamente.
A finales de 2024, la velocidad mediana de descarga en WiFi 6 en España alcanzó los 419,13 Mbps, superando las velocidades de WiFi 5 en más del 54% y el rendimiento de WiFi 4 por un orden de magnitud.
La latencia mediana en las conexiones WiFi 7 (19 ms) mejoró notablemente en comparación con los resultados de los estándares WiFi anteriores.
La consolidación de los routers WiFi tradicionales en España está limitando el potencial multi-gigabit de las conexiones de fibra, lo que erosiona la competitividad global del país en el rendimiento de la banda ancha fija y lo sitúa por detrás de otros países con abundante fibra, como Francia y los países nórdicos, en la adopción de estándares WiFi modernos.
