Las pymes europeas también quieren ser innovadoras. Lo demuestran cada día las start-ups, en muchas ocasiones, pioneras en el uso de la tecnología para prestar servicios pero también aquellas que han visto que la transformación digital no es un derecho sino una obligación. Sin embargo, sus presupuestos son limitados y tiene una fragilidad que les impide invertir más y más rápido.
Un estudio de IDC prevé que para 2020 el volumen de inversión tecnológica de estas pymes será de 130.000 millones de dólares. Una cantidad que supondrá una tercera parte de la gasto TI total y estará impulsada, sobre todo, por empresas de entre 10 y 99 empleados. Este segmento incrementará la demanda de tecnología un 1,7% anual mientras que las compañías más pequeñas de 1 a 9 trabajadores solo subirán sus presupuestos un 0,8%.
Las pymes generán una tercera parte del gasto TI
Nuevos canales, nuevas demandas
No obstante, la pyme tiene esa capacidad de innovar que no siempre se puede dar en la gran empresa. De ahí que la consultora observe que la inversión se acentúe en tecnologías innovadoras dejando las más tradicionales que crecerán a un ritmo menor.
Así, áreas como el cloud, IOT, la impresión 3D o la robótica irán teniendo más peso como un arma comercial más entre las pymes europeas. Debido a amenazas visibles y capaces de sensibilidad como el ransomware, la seguridad también será una zona a la que prestar atención.
No en vano justo esta es la línea en la que están trabajando los fabricantes. Estos están amoldándose a estas nuevas demandas de empresas más pequeñas pero con necesidades tecnológicas que cubrir. Un universo donde se abrirán nuevas oportunidades que necesitan de aquellos proveedores de servicios tecnológicos más cercanos y de confianza. ¿Eres tú?
