Los últimos resultados de Apple confirmaron que el de Cupertino es un fabricante de móviles. La caída desde 16 a 12,6 millones de iPads contrasta con los 61 millones de iPhone. Pero ¿son los phablets los que están canibalizando la demanda de los tablets?
El auge de los phablets es un síntoma más que presente en el mercado. La respuesta de Apple con sus iPhone 6 y iPhone 6 Plus han sido bien acogidos por los consumidores, incluso marcando hitos de ventas en países como China donde ya se venden más terminales que en Estados Unidos.
Precisamente en el país oriundo de Apple, los phablets ya representan un 25% de las ventas. Una crecimiento que ha ido muy en consonancia con la demanda de smartphones de la casa. Un hecho que justamente ha coincidido con la caída de los tablets. ¿Casualidad? Ni Tim Cook lo veía así.
Formatos cercanos
Durante la conferencia de resultados de Apple, su CEO comentó que la caída de los iPads no solo venía motivada por los iPhone sino también por la venta de Macs. Un hecho que sin asegurar que no sea cierto, cuesta más creer por la tipología de productos que cubren necesidades y públicos diferentes.
Si ponemos cerca un phablet y un tablet puede que tengamos dudas de saber cuál es cuál. Precisamente la escasa diferencia de tamaño en algunos modelos motiva que los usuarios utilicen el dispositivo de la misma forma. Y por extensión, los compradores optan por el teléfono con el que también pueden llamar.
Detrás de todos los análisis parece que el argumento es mucho más sencillo de lo que puede parecer: los usuarios han visto un uso más en los phablets después de todo lo que les aporta los tablets. Todo esto está ayudando a que el iPad, insignia del mercado tablet, decrezca mientras que los phablets suben como la espuma.
Estos movimientos son cuanto menos curiosos. Un nicho de movilidad se come a otro cuando parecía que iba a ser otra la situación: ¿Dónde se quedaron aquellos tiempos en los que los tablets iban a canibalizar a los ordenadores?
