Samsung ha presentado resultados trimestrales con fuerte caída de los beneficios especialmente por una división de móviles cuyo beneficio operativo se desplomó un 37 por ciento.
Samsung sigue al frente de las ventas mundiales de smartphones pero está perdiendo terreno frente a Apple y también frente a otros productores Android. Principalmente Xiaomi, que ya desplazó a Samsung como primer vendedor en China y se está expandiendo rápidamente en el mercado internacional.
Las ventas de sus tope de gama, Galaxy S6 y S6 Edge, no terminan de ser lo positivas que sus características técnicas tendrían que reflejar por lo que obviamente el problema es su precio.
Hay cierta saturación en los mercados principales (Europa y Estados Unidos) y los usuarios del resto de mercados que tiran al alza no parecen dispuestos a pagar 700 dólares cada dos años por cambiar de smartphone.
Lo estamos viendo con una gama media cada vez más interesante y por el que la mayoría de usuarios apuesta. O terminales premium a un precio mucho más moderado. Así las cosas, Samsung ha anunciado un “ajuste” de precios para sus tope de gama y lanzamientos de nuevos terminales (Note 5, Edge S6 Plus…) para todos los segmentos. No se conoce cuánto bajará el precio del Galaxy S6 y S6 Edge pero parece obligado para mantener ventas y el pulso a Apple y el resto de productores Android.
