Ante un segundo trimestre poco favorecedor, Fitbit solicitará menos pedidos de sus wearables. Una de las referencias del sector espera caídas de demanda durante el segundo trimestre que afrontará con más inversión en I+D para acelerar el negocio en el resto del año.
En un comunicado a sus inversores, la compañía comenta que ha rebajado un 12% su inventario para hacer frente a esta bajada de demanda. Durante el primer trimestre, Fitbit ingresó 505 millones de dólares, un 50% más que el pasado año que no fue suficiente para mejorar el valor de sus acciones: 27 céntimos en 2015 y 10 céntimos en el primer trimestre.
Respecto a la evaluación, Bill Zerella, CEO de la corporación añadía:
«Nos sentimos confiados con el ligero crecimiento de este año. La temporalidad será diferente este año debido a los tiempos de producto que estamos introduciendo».
Para el actual periodo, Fitbit pronostica unos ingresos de entre 565 y 585 millones de dólares. Los analistas de Wall Street los rebajan hasta los 531 millones de dólares. En el cómputo total del año esperan llegar a los 2.500 o 2.600 millones de dólares que les den un margen operativo de 48,5 o 49%.
Los resultados y previsiones nos hacen sacar diferentes conclusiones. Por un lado, la ralentización del nicho wearable y el consumo tecnológico generalizado. Una situación para la que algunos ven a China y sus consumidores interesados en dispositivos económicos como solución.
Por otro lado, es interesante ver el músculo de una compañía dedicada solo a este terreno. Una fortaleza que permite que 755 trabajadores estén dedicadas a investigar y desarrollar nuevos dispositivos. Una estrategia peligrosa que a otros como GoPro ya les está pasando factura.
