Lejos de disiparse el prácticamente monopolio de Android en España, el sistema cada día es más fuerte. Los últimos datos de Kantar Worldpanel ComTech (diciembre 2016 a febrero 2017) hablan del crecimiento más fuerte en nuestro país donde el software móvil tiene una de las cuotas más altas del mundo. El 92,2% de los smartphones funcionan con el sistema operativo de Google.
La continúa aceleración de Android afecta directamente a su directo competidor en España. iOS redujo su cuota de mercado comparada con el trimestre estudiado de 2016 un 1,7%. Así, el 7,4% de los terminales vendidos fueron un iPhone. Porcentajes mucho más reducidos para Windows (0,4%) que bajó medio punto respecto al año pasado.
iPhone: el 7,4% de los smartphones vendidos en España
Entre los líderes españoles destaca el segundo lugar de Huawei. El gigante chino ha conseguido calar pero su ritmo de crecimiento ya le pasa factura. Por delante el clásico Samsung. Con crecimientos de seis puntos en los tres meses analizados la española BQ y la china Xiaomi, que aún sin prácticamente venta oficial en España consigue acelerar su demanda.
Pero no todo son buenas noticias para Android. Frente al poder prácticamente absoluto en nuestro país, nos encontramos otros como Estados Unidos, donde Android ha caído 3 puntos e iOS ha subido 3,7, o Japón. En ambos, poco más de la mitad de los smartphones corren sobre el sistema del androide.
En China, por su parte, el sistema de Google está teniendo un crecimiento continuado gracias a marcas de éxito como Xiaomi o Huawei. En los últimos meses la subida de terminales con Android ha sido del 9,3% llegando a representar el 86,4% de todo el parque móvil del gigante asiático.
En cualquier caso los datos a nivel global demuestran que, pese a las diferencias locales, Android no tiene rivales que le hagan sombra. Aunque Apple le pisa los talones en algunos territorios, el cómputo general le da la victoria al software del androide. Su potente ecosistema abierto ha hecho que la plataforma sea atractiva tanto para modelos de gama baja de marcas desconocidas como para buques insignia tipo Samsung Galaxy S8 o Huawei P10. Y es que el sistema operativo cuenta con una popularidad y sencilla que Google está sabiendo rentabilizar.
