Oculus VR, empresa propiedad de Facebook, ha realizado dos anuncios importantes. El primero es que reduce de forma permanente el precio del Oculus Rift, y el segundo ha sido el esperado Oculus Go.
Ya habíamos ido viendo informaciones anteriores que apuntaban a que la compañía se iba a lanzar al mercado de los kits de realidad virtual independientes, aunque no estaba claro qué aproximación iba a llevar a cabo.
Tenía dos grandes opciones en cuanto a precio y prestaciones. La primera era lanzar un kit de realidad virtual independiente con un elevado nivel de prestaciones, y la segunda apostar por algo más modesto y también más económico.
Al final la compañía se ha inclinado a favor de lo segundo, ya que el Oculus Go es un kit de realidad virtual que puede trabajar por si mismo pero tiene un precio «económico» si tenemos en cuenta el precio del Oculus Rift.
Tras la bajada de precio permanente que ha recibido el Oculus Rift pasa a costar 449 euros en España. Por contra el Oculus Go ha sido anunciado con un precio de 199 dólares, cifra que en su adaptación al mercado español podría convertirse en 249 euros. Su lanzamiento se espera para 2018.
Ya tuvimos ocasión de ver en noticias anteriores que el precio de venta tiene un peso muy grande en la decisión de compra del usuario, ya que éste por lo general prefiere apostar por un kit de realidad virtual más asequible aunque ello implique sacrificar prestaciones.
Esto es consecuencia directa del estado actual en el que se encuentra el sector de la realidad virtual. Los contenidos todavía no tienen un nivel de calidad lo bastante alto como para justificar una inversión de varios cientos de euros, una situación que el consumidor ha asumido y que no parece que vaya a cambiar a corto plazo.