El precio de las tarjetas gráficas está disparado y no hay nada que los proveedores puedan hacer de momento para solucionarlo. Ya hemos hablado sobre ello en este artículo especial, y lamentablemente la situación no va a mejorar con la llegada de las GeForce GTX serie 2000.
Las GeForce GTX serie 2000 serán la próxima generación de tarjetas gráficas de consumo general de NVIDIA, sucesoras de las actuales GeForce GTX serie 1000. Su lanzamiento se espera para el segundo o tercer trimestre de este año, pero las primeras informaciones ya apuntan que tendrán un precio de venta elevado.
Es importante tener en cuenta que en este caso el problema no está en el precio de venta recomendado del proveedor, sino en el precio de venta final que decida poner cada minorista a las tarjetas gráficas que vende. Por ejemplo actualmente NVIDIA lista las GTX 1080 TI Founders Edition con un precio de 769 euros, pero están agotadas y ahora mismo es imposible encontrar modelos de dicha tarjeta gráfica por menos de 1.000 euros.
Los minoristas juegan con la ley de la oferta y la demanda, lo que significa que aunque tengan un precio recomendado determinado pueden vender el producto al precio que estimen conveniente. Esto quiere decir que si la demanda es muy elevada pueden subir el precio de forma gradual sin que afecte a sus ventas.
Esta realidad se está dejando notar desde hace meses y todo apunta a que volverá a hacer de las suyas con el lanzamiento de las GeForce GTX serie 2000. Se estima que las GeForce GTX 2080 podrían acabar costando unos 1.499 dólares, una cifra que superaría en más del doble el precio habitual de los nuevos tope de gama de NVIDIA, que suele rondar los 600-700 dólares en su lanzamiento.
Mientras la demanda siga alta y el sector del minado de criptodivisas esté preparado para hacerse con todo el stock de tarjetas gráficas de consumo general sin importarle el precio final la situación no sólo no mejorará, sino que podría acabar yendo a peor.
