El vicepresidente corporativo del Grupo de sistemas operativos de Microsoft, Joe Belfiore, ha confirmado la eliminación de Windows 10 S como una versión SKU independiente. Se convertirá en un «modo» dentro de las versiones regulares de Windows 10.
Windows 10 S fue presentado por Microsoft el pasado año en el evento #MicrosoftEDU. En una clara competencia a los dispositivos con el Chrome OS de Google, Windows 10 S es un sistema ligero y “simplificado” sobre la versión estándar del sistema, destacando por su mayor ligereza, autonomía, seguridad y facilidad de gestión y administración.
El problema son sus limitaciones en torno a la ejecución de aplicaciones, ya que solo pueden ejecutar las descargadas y certificadas por Microsoft Store. Los competidores ven a esta tienda como una plataforma cerrada que Microsoft utiliza para favorecer sus propias apps y servicios, y el grueso de desarrolladores muestran poco entusiasmo por trabajar para ella.
Bajo estas premisas, desde su anuncio se dudó del posicionamiento y éxito de este Windows 10 S, aunque se anunció un fuerte apoyo por parte de los OEM, con equipos de grandes socios de Microsoft: Acer, Asus, Dell, Fujitsu, HP, Samsung y Toshiba, además del propio Surface de Microsoft.
En pocos meses, Microsoft anunció la actualización gratuita de estos equipos a Windows 10 Home y también a la versión Pro pagando 49 dólares. Confirmación de todas las dudas que provocó esta versión y de las limitaciones que para muchos usuarios suponen, incluso en el nicho al que están destinados, educación y empresas.
El resultado es el adiós a Windows 10 S como hasta ahora lo conocíamos, como sistema independiente pre-instalado en equipos OEM. Será transformado a partir de 2019 en un “modo” dentro de otros sistemas operativos como Windows 10 Home, aunque se desconoce como funcionará y si Microsoft impondrá su habilitación por defecto en algunos equipos nuevos.
Tampoco está claro el futuro de la plataforma Windows 10 sobre ARM teniendo en cuenta que utiliza este Windows 10 S.
